La Federación Española de Industrias de Alimentación y Bebidas (FIAB) celebró recientemente su asamblea general, un espacio crucial para discutir los desafíos que enfrenta este sector en un contexto global incierto. Uno de los principales temas de preocupación es la incertidumbre generada por las políticas arancelarias de la Administración de Donald Trump. El peso de esta situación se siente tanto en la economía nacional como en la internacional, lo que plantea serios retos para la actividad exportadora.
Desafíos arancelarios y su impacto en el sector
El presidente de FIAB, Ignacio Silva, subrayó en su intervención que la tensión que enfrentan los sectores productivos se ha intensificado en los últimos meses. Este contexto nubla la proyección de crecimiento y desarrollo del sector alimentario y de bebidas en España. «Es palpable la presión a la que están abocados los sectores productivos», aseguró Silva, describiendo la volatilidad de la economía mundial como un factor que complica aún más la evolución de las exportaciones.
Además de los aranceles, Silva destacó que hay otros factores que también influenciarán la competitividad del sector en un futuro cercano. La nueva normativa medioambiental y la reforma laboral son aspectos que deben tenerse en cuenta, ya que podrían tener repercusiones importantes en la forma en que las empresas operan y en sus costos de producción.
Reformas y nuevas normativas: un enfoque hacia el futuro
La asamblea general se centró no solo en los desafíos, sino también en las posibles soluciones. Se discutió cómo la nueva normativa medioambiental y los cambios en la política alimentaria podrían actuar como herramientas clave para mejorar la competitividad del sector. Esto implica que las empresas deben adaptarse rápidamente a estas normativas para no quedar rezagadas en el mercado.
Silva recordó que, si bien los cambios regulatorios presentan retos, también abren oportunidades para innovar y adoptar prácticas más sostenibles. «Las empresas que se anticipen a estas regulaciones podrán posicionarse mejor en el mercado», argumentó.
Nuevos consejeros para una representación fresca
Durante la asamblea, también se llevaron a cabo cambios significativos en el consejo de dirección de FIAB. Se designaron nuevos consejeros que aportarán perspectivas frescas y diversas. Entre ellos, figura François Lacombe, director general de Danone Iberia, y Javier Dueñas Gil, consejero delegado de Campofrío España, quienes representan a AME.
Además, Pilar Puértolas López, directora general de Sanmy, y Cristina Piñol Farré, directora general para España y Portugal de AB Mauri, se unieron al consejo en representación de Anfabra y Fedima, respectivamente. Estos cambios reflejan un compromiso con la diversidad y la representación de distintas áreas dentro de la industria alimentaria.
Por otro lado, es importante mencionar que la asamblea aprobó la incorporación de la Asociación Española de Fragancias y Aromas Alimentarios (Aefaa) a la FIAB. Esta adición no solo amplía la representación del sector, sino que también fortalece la red de colaboración entre las industrias.
Agradecimientos e identificación de nuevos retos
En el marco de la asamblea, Silva también tuvo un espacio para agradecer a aquellos que dejan el consejo. Judith Viader, Agustín Gregori y Xavi Pons fueron reconocidos por su trabajo en la FIAB desde 2019. Su compromiso y dedicación han servido para guiar a la organización a través de tiempos ambivalentes y con frecuencia desafiantes.
El legado que dejan señala la necesidad de tener líderes visionarios que encapsulen la esencia de la industria y respondan a sus desafíos. Con la entrada de nuevos consejeros, la FIAB busca impulsar un cambio positivo y mantenerse relevante en un ambiente en constante transformación.
El camino por delante: estrategias y adaptaciones
Mirando hacia el futuro, es claro que la adaptación será clave para el éxito del sector alimentario y de bebidas. Los empresarios y los líderes de la industria deberán implementar estrategias eficaces que les permitan enfrentar no solo la incertidumbre provocada por los aranceles, sino también las nuevas normativas regulatorias que están en camino. Esto podría implicar la inversión en tecnologías más limpias o el desarrollo de productos que se alineen con los estándares medioambientales emergentes.
La colaboración entre diferentes actores de la industria será fundamental en esta transición. La sostenibilidad y la innovación deben convertirse en pilares de la estrategia operativa de las empresas, permitiendo así no solo la supervivencia, sino el crecimiento en un mercado que se torna cada vez más competitivo.
Como miembro de este sector, ahora es fundamental que reflexiones sobre las medidas que puedes tomar para adaptarte a estas circunstancias. Considera la posibilidad de ampliar tu red de contactos, involucrarte en iniciativas sostenibles, y mantenerte informado sobre las últimas regulaciones para garantizar que tu empresa no solo navegue las corrientes del cambio, sino que también fomente un panorama más próspero y equilibrado.