El crecimiento medio del precio de la vivienda nueva y usada en 2024 se ha situado en un 3,5%, lo que revela un panorama mixto en el mercado inmobiliario español. Las tasaciones recientes indican que, en el último trimestre del año, los precios han experimentado un notable aumento del 4,4% en comparación con el año anterior y del 2,2% respecto al tercer trimestre, según las estadísticas de Tinsa.
Inflación y poder adquisitivo
Cuando se ajusta por inflación, el crecimiento interanual en términos reales se ha incrementado hasta el 2,3%, frente al 1,0% registrado en el trimestre anterior. Este cambio puede atribuirse, en parte, al abaratamiento del coste de la financiación, impulsado por un cambio en la política monetaria del Banco Central Europeo (BCE). Esto, junto con un acceso más fácil al crédito, ha estimulado una mayor demanda en el sector.
Cristina Arias, directora del servicio de Estudios de Tinsa by Accumin, ha subrayado que la resistencia del empleo y la recuperación del poder adquisitivo de los hogares durante el último año son factores clave que han mantenido la solvencia de la demanda. Además, ha señalado que el incremento en la demanda también se debe a la inmigración y a las compras por parte de no residentes.
Crecimiento dispar entre comunidades autónomas
Las variaciones en los precios no son uniformes en todo el territorio nacional. Durante el cuarto trimestre, se han registrado crecimientos interanuales superiores al 6% en comunidades como Baleares (+10,8%), Cantabria (+8,5%), y Madrid (+7,0%). Sin embargo, hay excepciones, ya que las ciudades autónomas de Ceuta y Melilla han visto ajustes a la baja, con descensos del 2,5% y 1,5%, respectivamente.
Los incrementos sostenidos en varias comunidades, como los archipiélagos, han sido notables. Por ejemplo, Andalucía y Baleares han mostrado constantes avances en trimestres previos, lo que también se ha reflejado en un repunte de las tasas trimestrales en Madrid y Comunidad Valenciana.
Características del mercado inmobiliario
El valor medio de la vivienda en España se sitúa en 1.846 euros por metro cuadrado en el último trimestre, cifra que aún se encuentra un 14,6% por debajo del máximo alcanzado en el cuarto trimestre de 2007. Desde un mínimo registrado en el verano de 2015, los precios han aumentado casi un 45%. Se espera que, gracias a un contexto de ahorro elevado, normalización del poder adquisitivo y un restablecimiento de la confianza del consumidor, el abaratamiento de la financiación permita que la demanda residencial y la inversión sigan creciendo.
En cuanto a las transacciones, los niveles son considerados robustos, superando la media histórica de 522.000 operaciones anuales. No obstante, algunos factores podrían moderar este crecimiento. Uno de ellos es el alto volumen actual de transacciones, que podría limitar el crecimiento futuro. Además, la escasez de oferta en zonas de alta demanda afecta la posibilidad de crear nuevos hogares, lo que puede tensionar los precios y dificultar el acceso a la vivienda para una parte significativa de la población.
Proyecciones para el futuro del sector
El panorama para el futuro inmediato del mercado inmobiliario indica que las compraventas de viviendas se mantendrán en niveles robustos en 2025, aunque se prevé un crecimiento más moderado en tanto en volumen como en precios. Los expertos, como Arias, advierten sobre la necesidad de un equilibrio en el acceso a la vivienda para todas las capas de la sociedad.
En este contexto, las regiones que más se acercan a los máximos de precios alcanzados durante la burbuja inmobiliaria son las Islas Baleares, donde los precios han superado los niveles de máximo anteriores en un 16,9% y Madrid, que se encuentra un 2,5% por debajo de esos picos históricos. Sin embargo, se deben seguir de cerca las dinámicas regionales, ya que las condiciones pueden variar significativamente.
La situación actual sugiere que, si bien el crecimiento está siendo apoyado por una serie de factores económicos favorables, las políticas de vivienda y la regulación en el sector serán fundamentales para garantizar que el acceso a la vivienda se mantenga equilibrado y viable para todos los ciudadanos. Te invitamos a mantenerte informado sobre las tendencias del mercado y a considerar cómo estas pueden afectar tus decisiones de inversión o compra en el futuro cercano.