La inversión inmobiliaria en España ha registrado un significativo crecimiento durante el año 2024, alcanzando casi 14.000 millones de euros, lo que representa un aumento del 20% en comparación con el ejercicio anterior, que se situó en 11.613 millones de euros. Esta recuperación es especialmente notable tras un 2023 marcado por la incertidumbre económica y un entorno de tipos de interés en constante ascenso.
Datos del mercado inmobiliario en 2024
El cuarto trimestre del año se destacó como el más activo, acumulando cerca del 36% de la inversión total, es decir, casi 5.000 millones de euros transaccionados. Además, el número de transacciones experimentó un crecimiento del 5% a lo largo del año, lo que evidencia un dinamismo renovado en el sector inmobiliario.
Por sector, el residencial consolidó su liderazgo al acaparar 4.300 millones de euros, lo que representa el 31% del total invertido. Otros sectores significativos fueron el hotelero, con 3.200 millones de euros; el retail, que alcanzó los 2.900 millones; las oficinas, con 1.600 millones; y el sector industrial y logístico, que sumó 1.400 millones en inversiones.
Composición de los inversores en el sector
La composición de los inversores ha experimentado cambios relevantes. El peso del inversor privado se mantuvo estable en un 14%, beneficiándose de su menor dependencia de financiación y su mayor capacidad de liquidez. En contraste, los fondos de inversión mostraron una mayor actividad, aumentando su participación del 9% en 2023 al 18% en 2024. Por su parte, el segmento de midcaps también creció, alcanzando un 20% de la inversión total, según datos de la consultora.
En términos de origen de la inversión, el capital nacional lideró el panorama, aportando un 55% de la inversión. Los inversores de Estados Unidos y Reino Unido fueron los siguientes, con un 13% y un 6%, respectivamente. No obstante, destaca el notable aumento de la inversión latinoamericana, que se multiplicó por cinco, alcanzando 500 millones de euros, especialmente en el sector de oficinas, que concentró más del 40% de esta inversión.
El atractivo de las ubicaciones no tradicionales
Las ubicaciones fuera de los tradicionales mercados de Madrid y Barcelona demostraron un notable atractivo, concentrando más del 52% de la inversión en 2024. Esta cifra contrasta con el 36% que representaban estas localizaciones en 2019, antes de la pandemia. Del volumen transaccionado este año, Madrid concentró un 32% y Barcelona un 16%, reafirmando su relevancia en el mercado.
Esta tendencia sugiere que inversores están comenzando a diversificar sus carteras, buscando oportunidades en regiones menos convencionales. Además, la revalorización de zonas periurbanas y municipios más pequeños podría ser una estrategia favorable ante un contexto de inestabilidad económica.
Perspectivas para el futuro del sector inmobiliario
La directora de Capital Markets en España de CBRE, Paloma Relinque, ha hecho hincapié en que los datos de 2024 confirman la senda de recuperación del mercado inmobiliario español. Según ella, «existe liquidez e interés en el mercado inmobiliario español para la mayor parte de los sectores tradicionales y alternativos». Esto indica que el mercado se vuelve más accesible y atractivo tanto para inversores nacionales como internacionales.
De cara al año 2025, se esperan condiciones más favorables, lo que podría traducirse en un incremento de la inversión. Esto se hace aún más relevante ante una posible estabilización de los tipos de interés y una mayor claridad en el panorama macroeconómico.
La evolución del mercado inmobiliario en España es un indicador clave para comprender la salud de la economía local. Los inversores deben estar atentos a estas tendencias, ya que el 2025 promete ser un año decisivo para el desarrollo y la expansión en el sector inmobiliario. Mantenerse informado y considerar las diferentes oportunidades y sectores emergentes será fundamental para quienes deseen capitalizar sobre las fluctuaciones y recuperaciones del mercado.