El secretario de Estudios y Formación Sindical de CCOO, Carlos Gutiérrez, ha hecho una valoración positiva sobre los datos de paro y afiliación a la Seguridad Social correspondientes a diciembre, así como del conjunto del año 2024. Haciendo un llamado a fijar nuevas metas a medio plazo, Gutiérrez ha propuesto que el pleno empleo sea un objetivo prioritario.
Datos destacados del cierre de 2024
«Con el aumento de la afiliación a la Seguridad Social de este mes, cerramos el año 2024 con 500.000 personas más afiliadas que en 2023. Así, superamos las 21.300.000 personas«, expresó Gutiérrez. Además, el análisis de los datos de desempleo permitió destacar que el paro ha disminuido, alcanzando su nivel más bajo en 17 años. Estos resultados evidencian la recuperación del mercado laboral español y generan un optimismo moderado sobre la continuidad de esta tendencia en el futuro.
El mensaje de Gutiérrez también incluyó la celebración por la mejora en la calidad del empleo. Ha habido un aumento notable en el número de trabajadores con contratos indefinidos, mientras que se ha registrado un descenso en los contratos fijos discontinuos y temporales. «La contratación ofrece una imagen estable y ahora hay que firmar menos contratos para generar empleo. Del total de contratos firmados durante este año, el 42% son indefinidos», destacó el responsable sindical.
Desafíos y objetivos para 2025
De cara al año 2025, Gutiérrez ha enfatizado que la meta debe ser la creación de empleo y la reducción del desempleo. «No debemos perder de vista que el horizonte debe centrarse en el pleno empleo«, insistió. En este sentido, se plantean diversas acciones que consideran críticas para el avance del mercado laboral.
Es fundamental que aumenten la inversión productiva tanto del sector público como del privado. Esto no solo fomentará la creación de nuevos puestos de trabajo, sino que también incentivará una dinámica económica más robusta. Asimismo, para impulsar el consumo, es vital que se realicen aumentos salariales. Esto no solo beneficiará a los trabajadores, sino que también ayudará a revitalizar diferentes sectores económicos, promoviendo así una mayor actividad económica en el país.
Por otra parte, Gutiérrez señaló la relevancia de que la reducción de la jornada laboral, acordada entre los sindicatos y el Gobierno, se lleve a cabo de manera efectiva. Esta medida puede contribuir a mejorar la calidad de vida de los trabajadores y a fomentar un equilibrio entre el trabajo y la vida personal, lo que podría repercutir positivamente en la productividad y satisfacción laboral.
Perspectivas sobre la calidad del empleo
Otro aspecto que merece destaque es la evolución de la calidad del empleo en España. A lo largo del año, hemos visto un cambio significativo en la naturaleza de los contratos. Mientras que cada vez hay más contratos indefinidos, el número de empleados con contratos temporales ha comenzado a disminuir. Esto sugiere que el mercado laboral se está orientando hacia una estabilidad que puede ser muy beneficiosa para los trabajadores.
«El objetivo es avanzar hacia un empleo más estable y bien remunerado», afirmó Gutiérrez. La alta proporción de contratos indefinidos firmados durante 2024 es un indicativo positivo, y se espera que esta tendencia continúe en el futuro cercano. La calidad del empleo no solo implica estabilidad, sino también mejores condiciones laborales y un aumento en la confianza tanto de los trabajadores como de los empleadores en el sistema.
La inversión como motor del crecimiento
Para lograr estos objetivos, es que la inversión debe ser un eje central en la estrategia económica. La colaboración entre el sector público y el privado es esencial para estimular el crecimiento. Según analistas económicos, una mayor inversión en infraestructura, innovación y formación contribuirá a crear un entorno propicio para el empleo.
Por lo tanto, es importante que las instituciones gubernamentales y empresas privadas se comprometan a destinar recursos que potencien la capacidad productiva del país. Esto no solo generará oportunidades de empleo, sino que también se traducirá en una economía más competitiva a nivel internacional.
En este contexto, la dinámica del consumo también juega un papel crucial. Un aumento en los salarios puede resultar en un efecto multiplicador en la economía. Al tener más capacidad de gasto, los consumidores son capaces de mover el mercado, favoreciendo la creación de empleo y el crecimiento económico.
La relación entre salario y consumo es, por tanto, un aspecto a tener en cuenta por las autoridades competentes y los agentes sociales. Una economía dinámica es aquella que se alimenta de un consumo constante y creciente, lo que fortalece a diversos sectores económicos.
Siempre es posible ser optimista sobre la situación laboral en el futuro, especialmente si se fijan estos objetivos. Si bien el panorama actual es alentador, permanece como un desafío que los empleados, empleadores y el Gobierno colaboren para que la estabilidad laboral y la mejora de las condiciones de vida logren consolidarse en el tiempo. La acción coordinada es la clave para que España continúe avanzando hacia un mercado laboral más próspero y equitativo.