Los contratos de alquiler que se firmaron después del 25 de mayo de 2023 deberán actualizar su renta utilizando un nuevo índice establecido por el Instituto Nacional de Estadística (INE). Este cambio entra en vigor para todos los contratos que revisen su anualidad a partir de 2025.
Nuevo índice para la actualización de contratos
A partir del 2 de enero, el INE publicará mensualmente un índice que servirá como límite para la actualización de los contratos de arrendamiento, expresado con dos decimales. Este nuevo método de cálculo tendrá en cuenta no solo el IPC, sino también la inflación subyacente y las variaciones en las tasas de crecimiento de ambos indicadores.
Este nuevo índice considera varios factores, incluyendo un parámetro propuesto por la Dirección General de Política Económica, que está vinculado al crecimiento a largo plazo del índice. Así, el objeto de esta medida es ofrecer una herramienta que permita ajustar la renta de una manera más controlada y justa.
A diferencia de métodos anteriores, el nuevo índice se calculará aplicando un coeficiente moderador, resultado de la colaboración entre la Dirección General de Vivienda y Suelo del Ministerio de Vivienda y Agenda Urbana y la Dirección General de Política Económica del Ministerio de Economía, Comercio y Empresa. Esto tiene como finalidad adaptarse a las condiciones del mercado de alquiler.
Un cambio para los contratos firmados después de mayo de 2023
Con la implementación de este nuevo índice, la actualización anual de los contratos de arrendamiento de vivienda dependerá, al menos, de tres elementos: la tasa de variación anual del IPC, la tasa de variación anual de la inflación subyacente y la tasa de variación anual media ajustada. Este enfoque permite establecer un límite para evitar aumentos de renta desproporcionados, protegiendo así los derechos de los inquilinos.
Este nuevo mecanismo de actualización está estipulado en la disposición adicional undécima de la Ley por el Derecho a la vivienda, que establece que el INE debe definir un índice de referencia para los contratos de arrendamiento antes del 31 de diciembre de 2024. Esta proyección debe ser cumplida para garantizar una mayor estabilidad en el sector de la vivienda.
Límites en la actualización de rentas durante la crisis
Este año, la actualización de las anualidades del alquiler estuvo limitada de manera extraordinaria a un 3% debido a los incrementos de precios provocados por la guerra de Ucrania. Sin embargo, esta no es la única medida adoptada por el Gobierno frente a la crisis inflacionaria.
El Ejecutivo español ya había establecido, a través de un Real Decreto-Ley, que el Índice de Garantía de Competitividad (IGC), que se encuentra topado al 2%, sirviera como un límite adicional para la actualización de los contratos de arrendamiento en 2022 y 2023. Este índice también establece que la actualización nunca podrá ser inferior al 0%.
Actualización de la renta para contratos anteriores a mayo de 2023
Para los contratos que fueron firmados antes de la entrada en vigor de la Ley por el Derecho a la Vivienda, es decir, hasta el 25 de mayo de 2023, la actualización de la renta se realizará de acuerdo con lo estipulado en cada contrato. Así, la renta anual se podrá ajustar utilizando el dato del Índice de Precios al Consumidor (IPC) o el IGC, según lo acordado previamente.
Fuentes del Ministerio de Vivienda han aclarado que la forma en que se revalorizará esta renta dependerá de lo estipulado en el contrato de alquiler. Por tanto, los inquilinos seguirán ateniéndose al índice fijado en sus contratos, ya sea el IPC o el IGC, con la salvedad de que en ninguno de los casos la actualización podrá superar el 2%.
Proyecciones y recomendaciones para arrendatarios
Este escenario está diseñado para proporcionar a los arrendatarios una mayor previsibilidad en sus gastos relacionados con la vivienda. Sin embargo, es importante estar informado sobre las condiciones específicas de cada contrato y las implicaciones de las leyes que afectan el mercado de alquiler.
Ante este panorama, es recomendable que los inquilinos revisen sus contratos y comprendan completamente las variables que influyen en la actualización de su renta. Anotar las fechas clave y los índices aplicables puede ofrecer ventajas a la hora de negociar en futuras renovaciones.
La inclusión de este nuevo sistema de actualización añade una capa de estabilidad en un mercado fluctuante y, mientras que se ponen en marcha estos cambios, es crucial que tanto arrendadores como inquilinos mantengan un diálogo abierto y busquen asesoría cuando sea necesario para evitar sorpresas en sus gastos mensuales de vivienda.