Las instalaciones de servicio independientes en España han logrado consolidar su posición en el mercado, alcanzando más del 45% de la red nacional a finales de 2024. Este avance se produce a expensas de las gasolineras abanderadas, que están controladas por los tres principales operadores con capacidad de refino en el país: Repsol, Moeve y BP, que reducen su cuota al 43%. La evolución del sector refleja cambios significativos en la dinámica de mercado que se han evidenciado a lo largo de los últimos años.
Incremento de las estaciones de servicio independientes
Según el último boletín informativo de distribución de carburantes de la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC), el número total de estaciones de servicio en España alcanzó las 12.631 a finales de 2024, registrando un aumento neto de 96 puntos de venta. Este crecimiento es particularmente notable en el segmento de las gasolineras independientes, que añadieron 60 nuevas instalaciones dentro del mismo periodo.
Este auge, que se ha manifestado desde 2013, no solo se debe a nuevas aperturas, sino también a la creciente desvinculación de los operadores de estaciones de servicio respecto a los contratos de suministro en exclusiva. Así, el crecimiento del modelo independiente refleja un cambio estructural en la oferta de carburantes en el mercado español.
Comparativa histórica y tendencias de apertura
La comparación con años anteriores es reveladora. En 2009, las estaciones de servicio independientes representaban apenas el 28% de la red nacional, mientras que los tres operadores principales contaban con una participación significativa del 55%. Esta evolución pone de manifiesto un cambio sostenible en las preferencias de los consumidores y en la estructura del mercado.
Además, las redes de marcas independientes están viendo un auge notorio en su presencia. Según los datos de la CNMC, redes como Plenergy, Ballenoil y Petroprix han visto un aumento en sus instalaciones, con 291, 280 y 159 puntos de venta censados al 31 de diciembre de 2024, respectivamente. Este fenómeno de crecimiento sugiere que la competencia en el sector está tomando un rumbo más diverso, beneficiando a los consumidores con opciones adicionales.
Modelo desatendido en expansión
Por otro lado, el modelo desatendido ha proliferado significativamente en los últimos años. A finales de 2024, este tipo de estaciones representaban ya el 14,3% del total en el país, evidenciando una tendencia al alza que ha comenzado desde 2020. Las estaciones desatendidas son predominantemente aquellas que operan en régimen completamente desatendido, representando más del 75% del horario de apertura, mientras que la parte restante opera en función de un servicio parcialmente desatendido.
Durante este periodo, las estaciones desatendidas experimentaron un incremento de 338 instalaciones, lo que resalta la aceptación de este modelo entre los consumidores españoles, quienes parecen apreciar la comodidad y la flexibilidad que este sistema ofrece, a pesar de que puede implicar un servicio al cliente limitado.
Movimiento de adquisiciones y nuevas dinámicas
Un aspecto relevante en este contexto es la reciente adquisición de la red independiente Ballenoil por parte del operador Moeve en 2024. A pesar de esta integración, las estaciones que forman parte de Ballenoil continuarán operando bajo su marca, lo que sugiere que la estrategia de Moeve se centra en mantener la identidad de un modelo exitoso entre los consumidores.
Por su parte, la red de Repsol, el operador con mayor cuota de mercado en España, ha mostrado desde 2014 una tendencia a la baja, aunque el año pasado se registró una pausa en esta caída, cerrando con 3.226 puntos de venta. Este estancamiento indica que, a pesar de los desafíos y la competencia creciente, la red de Repsol ha logrado sostener su presencia en el mercado.
Estabilidad de las redes de hipermercados
Asimismo, es importante mencionar la evolución de las redes asociadas a hipermercados como Carrefour, Alcampo y Eroski, que experimentaron un crecimiento significativo entre 2013 y 2021, pero parecen haber alcanzado un nivel de estabilidad en los últimos años. Esto plantea interrogantes sobre su capacidad para adaptarse a las nuevas dinámicas del mercado, especialmente en un entorno competitivo donde las independientes están ganando terreno.
En conclusión, la evolución de las estaciones de servicio en España hacia un predominio de las modalidades independientes y el incremento del modelo desatendido subrayan un cambio notable en las preferencias del consumidor. De mantenerse esta tendencia, es probable que el sector continúe diversificándose y que nuevas estrategias de negocio se harían necesarias para asegurar la competitividad de las grandes marcas. Así, el panorama económico para las estaciones de servicio podría enfrentarse a transformaciones aún más significativas en los próximos años, donde la innovación y la adaptación serán cruciales para sobrevivir en un entorno de mercado cada vez más dinámico y competitivo.