La junta de accionistas de Cellnex ha llevado a cabo decisiones significativas en su reciente reunión, donde se aprobó el nombramiento de Luis Mañas como nuevo consejero independiente y una considerable reducción de capital social de hasta diez millones de euros, mediante la amortización de hasta cuarenta millones de acciones propias. Este movimiento está estrechamente relacionado con el programa de recompra de acciones de la empresa, que se lanzó a principios de marzo y del cual ya se ha ejecutado un 93%.
Nombramiento de Luis Mañas
En el ámbito de la nueva dirección de la compañía, es importante resaltar que Luis Mañas cuenta con una sólida formación académica, siendo licenciado en Ciencias Económicas y Derecho por la Universidad Autónoma de Madrid y Doctor en Economía por la Universidad de Chicago. Su carrera profesional comenzó en 1985 como economista en el Fondo Monetario Internacional (FMI), emprendiéndose posteriormente en roles consultivos dentro de The World Bank Group y como asesor ejecutivo en el Ministerio de Economía y Hacienda.
Su trayectoria en el sector privado se destacó al unirse a Repsol en 1987, donde ocupó posiciones clave, tales como economista jefe y director financiero. En su último rol, mantuvo una influencia significativa como director financiero y miembro del Comité de Dirección, aportando su experiencia valiosa en el ámbito financiero y de planificación corporativa.
resultados financieros de 2024
Además de las decisiones estratégicas de liderazgo, la junta también aprobó los resultados financieros de 2024, donde Cellnex reportó ingresos que ascenderán a 3.941 millones de euros, junto con un resultado bruto de explotación (Ebitda) ajustado que alcanza 3.250 millones de euros. Esta cifra indica el rendimiento robusto de la compañía en un entorno empresarial competitivo.
El presidente de Cellnex, Óscar Fanjul, enfatizó durante su discurso la importancia de priorizar tanto el crecimiento como el retorno de capital a los accionistas, una estrategia que ha guiado a la empresa desde su salida a bolsa. En este sentido, ha subrayado la necesidad de maximizar la rentabilidad del capital como un criterio indispensable para el futuro de la compañía.
Reduciendo capital a través de la recompra de acciones
La reducción de capital de hasta diez millones de euros está concebida como parte de un programa de recompra más amplio, el cual suma un total de 800 millones de euros. Este programa tiene como meta amortizar las acciones propias con el fin de incrementar el valor de las acciones restantes y asegurar un retorno directo a los accionistas. El hecho de que el 93% del programa ya haya sido ejecutado resalta el compromiso y la capacidad de la empresa para llevar a cabo esta estrategia.
Fanjul ha manifestado que esta recompra no solo considera el retorno del capital a sus accionistas mediante dividendos, sino también la ejecución de planes de crecimiento robustos, con una inversión prevista que supera los 5.000 millones en los próximos tres años. Tal enfoque permitirá a Cellnex mantener su estatus de Investment Grade en el ámbito del crédito, consolidando su posición en el mercado.
Compromiso con la rentabilidad y el futuro
La celebración del décimo aniversario de la salida a bolsa de Cellnex proporciona un contexto significativo para las reflexiones de Fanjul sobre la trayectoria de la empresa. En esta década, la compañía ha logrado una rentabilidad superior al 13% anual, una cifra que no solo ha superado a indicadores como el Ibex 35, el S&P 500 y la bolsa mundial, sino que también evidencia el enfoque estratégico en la sostenibilidad y rentabilidad a largo plazo.
El presidente destacó que la búsqueda constante de rentabilidad ha sido una de las señas de identidad de Cellnex, lo que se traduce en un enfoque proactivo hacia la adquisición y expansión. Este compromiso con el crecimiento y la consolidación industrial se ha visto respaldado por ampliaciones de capital que suman 15.000 millones de euros, destacando la capacidad de la empresa para adaptarse y responder a las demandas del mercado.
Es evidente que las decisiones tomadas por Cellnex reflejan un enfoque claro hacia la sustentabilidad económica y la rentabilidad continua, en un contexto de creciente competitividad y sofisticación del mercado. A medida que la empresa ejecuta su ambicioso plan de crecimiento, su capacidad para generar ingresos y ofrecer retornos a sus accionistas se convierte en un indicador clave de su éxito continuo. Este tipo de estrategias no solamente refuerzan la posición de Cellnex en el mercado, sino que también envían una señal clara al resto de la industria sobre la importancia de equilibrar el crecimiento empresarial con la creación de valor para los accionistas. Esta dualidad entre crecimiento e inversión será crucial para el futuro de Cellnex y podría servir como un modelo a seguir por otras empresas en el sector, en busca de adaptarse a un entorno económico cambiante.