Para Valle, “este edificio es testigo vivo del proceso de transformación del Bajo Guadalquivir en el último medio siglo y ejemplo de recuperación del patrimonio industrial de nuestro pueblo”.
Mientras repartían un boletín informativo, Miguel Ángel Mendoza, portavoz del grupo (IU) en el Ayuntamiento; Ana Belén, concejala; y un simpatizante del grupo han sufrido tanto una agresión física (patadas y puñetazos) como amenazas al grito de “te voy a quemar la casa”, o “te vamos a reventar”, por parte de familiares de cargos públicos del Ayuntamiento de la localidad.