El 26 de noviembre de 1995, en Estados Unidos, se le concede la patente del “Proceso de codificación digital” con el número 5.579.430 a la Fraunhofer Institut de Alemania
La chica había sido trasladada en una UVI del Summa-112 hasta la Fundación Hospital Alcorcón, donde quedó ingresada con pronóstico muy grave, falleciendo finalmente