La Federación estatal de Servicios, Movilidad y Consumo (FeSMC-UGT) ha realizado un análisis del empleo en España, destacando que el 52% del empleo nacional se encuentra en su ámbito de acción. No obstante, de los 407.900 puestos de trabajo que se generaron en el último año a tiempo completo, solo el 26% está relacionado con los sectores de comercio, transportes y hostelería.
El crecimiento del empleo en el contexto económico
Aunque el sector servicios ha demostrado ser el motor de crecimiento económico en España, los datos del último trimestre revelan que la variación intertrimestral del sector primario fue del 1,1%, superando el crecimiento del 0,2% en la industria. Este patrón plantea interrogantes sobre la sostenibilidad del crecimiento en un contexto donde otros sectores comienzan a mostrar una reactivación notable.
El informe de Contabilidad Nacional del tercer trimestre de 2024 muestra que el empleo en comercio, transporte y hostelería experimentó un incremento del 1,2%, un crecimiento que contrasta con el 2,4% del resto de la economía. Estos datos indican que, a pesar de que los sectores mencionados siguen siendo relevantes, su ritmo de crecimiento no se mantiene al mismo nivel que otras áreas de la economía.
Las actividades generadoras de empleo
Un aspecto notable del análisis es que las actividades profesionales científicas han sido la principal fuente de empleo en el último año, contribuyendo con un 13,4% a la generación total, equivalente a 54.600 nuevos puestos de trabajo. Además, las actividades de información y comunicaciones han aportado 12,7%, un total de 51.600 empleos. Estos datos resaltan una tendencia hacia la digitalización y la profesionalización en la economía nacional, lo que podría indicar un cambio estructural en el mercado laboral.
A medida que el país avanza hacia una economía más dinámica, sectores como el tecnológico y los servicios profesionales están comenzando a atraer un número considerable de trabajadores. Esto no solo transforma el paisaje laboral, sino que también plantea diversas oportunidades para las futuras generaciones, siempre y cuando se fomente un entorno laboral que asegure la calidad de los empleos.
Retos en la negociación colectiva
FeSMC-UGT subraya en su informe la necesidad de armonizar el crecimiento económico con la creación de empleo de calidad. Para lograrlo, la federación aboga por la negociación colectiva entre los diversos sectores económicos. Este enfoque es fundamental para establecer un equilibrio que permita un crecimiento prolongado y sostenible en el tiempo, beneficiando tanto a trabajadores como a empleadores.
Reforzar estas negociaciones es crucial, ya que el mercado laboral no solo debe ocuparse de la cantidad de empleos generados, sino también de la calidad de estos. En este sentido, es vital establecer condiciones que fomenten no solo la estabilidad laboral, sino también la mejora constante de las condiciones de trabajo.
El impacto de los salarios en la calidad de vida
Un aspecto destacado por FeSMC-UGT es la importancia de que los salarios reales recuperen su poder de compra. Mejorar estas condiciones laborales, en los sectores mencionados, repercutirá positivamente tanto en la calidad de vida de los trabajadores como en la salud de la economía en general. Cuando los empleados perciben salarios dignos, se traduce en un aumento del consumo y, por ende, un estímulo a la actividad económica.
Este incremento en el poder adquisitivo no solo es vital para los hogares, sino que también actúa como un catalizador de crecimiento para los negocios locales, fomentando una economía más robusta y resiliente. Es, por tanto, esencial que tanto las empresas como los gobiernos tomen medidas concretas para garantizar que esta dinámica se mantenga y se fortalezca en el futuro.
Perspectivas futuras y recomendaciones
Mirando hacia adelante, resulta fundamental que los responsables de la política económica, así como las organizaciones laborales y empresariales, trabajen en conjunto para responder a las transformaciones del mercado laboral. Sería prudente considerar el establecimiento de políticas que promuevan inversiones en formación y capacitación de los trabajadores, en especial en sectores emergentes como la tecnología y la sostenibilidad.
Además, es esencial fomentar un diálogo constante entre empleadores y empleados que permita identificar y resolver conflictos antes de que escalen, preservando así la estabilidad laboral. Establecer un marco de negociación clara y justa contribuirá a mejorar no solo la satisfacción de los empleados, sino también la competitividad del sector servicios en general. Al final, el objetivo debe ser construir una economía donde todos los sectores puedan prosperar de manera equitativa y sostenible.