El secretario de Estado de Trabajo, Joaquín Pérez Rey, ha calificado los datos de paro registrado y afiliación de diciembre como un «broche» que cierra un año 2024 «bueno» para el empleo. Esta evaluación se produce en un contexto en que las cifras son más favorables que el año anterior, rompiendo la tendencia negativa que se había mantenido en años previos.
Mejora del empleo en un contexto complicado
Pérez Rey ha mencionado que, a pesar de una coordinación económica desfavorable, el comportamiento del empleo ha sido «muy positivo» por primera vez. Según sus declaraciones, este cambio se debe a una transformación en el sistema de relaciones laborales en España, que ha pasado a ser un modelo «no tan alérgico a los vaivenes económicos». Este nuevo enfoque está orientado a construir empleos estables y de calidad, lo que resulta esencial para una recuperación sostenida.
El secretario de Estado ha subrayado que diciembre sigue la tendencia de un buen año para el empleo. Se ha registrado una bajada en el paro de 25,300 personas, cifra que supera la media de años anteriores. Para ser más específicos, en los últimos 22 años, la media de reducción del desempleo ha sido de 15,000 personas, lo que revela que estamos muy por encima de lo habitual en términos de descenso del paro.
Cifras históricas y grupos beneficiados
A lo largo de 2024, se ha logrado cerrar con la cifra «más baja» de personas desempleadas desde hace 17 años. En total, se contabilizan 2,561,000 desempleados, con una notable caída que ha impactado especialmente a mujeres y jóvenes. Este descenso en las cifras es un indicador positivo no solo para el presente, sino también para la futura dinámica del mercado laboral.
Además de la reducción del paro, Pérez Rey destacó un incremento considerable en la tasa de cobertura relacionada con la protección social y el desempleo. Esto indica que más personas tienen acceso a recursos que les permiten afrontar situaciones de vulnerabilidad, lo que es un avance en términos de bienestar social.
Afiliación en alza: un signo de recuperación sostenida
Por su parte, Borja Suárez, secretario de Estado de Pensiones y Seguridad Social, ha resaltado que diciembre marca el 56º mes consecutivo de aumento en la afiliación a la Seguridad Social en términos desestacionalizados. Esto muestra una tendencia clara hacia la estabilización y crecimiento del empleo en el país.
El número de afiliados en diciembre se sitúa muy por encima de los 21,3 millones, alcanzando casi 21,35 millones. Esto representa un crecimiento de casi 2 millones de afiliados desde diciembre de 2019, lo que pone en relieve la recuperación del mercado laboral en el contexto actual.
En el último trimestre del año, específicamente desde octubre hasta diciembre, y a pesar de la adversidad provocada por la DANA y las tensiones de la coyuntura internacional, la cifra de afiliación ha resultado «más positiva» que en años anteriores, como 2023 o 2022. Este último trimestre ha dado como resultado un ambiente laboral «muy positivo», corroborando la tendencia favorable observada a lo largo del año.
Impacto social y futuro laboral
La caída en el desempleo y el aumento en la afiliación no solo afectan a las estadísticas; tienen un impacto real en la vida de las personas. Una menor tasa de desempleo proporciona mayores oportunidades laborales, particularmente para segmentos poblacionales vulnerables, como mujeres y jóvenes, quienes han sufrido más las consecuencias de la crisis económica en años pasados.
El incremento en la cobertura de protección social es igualmente significativo, ya que ayuda a fortalecer la red de seguridad para quienes enfrentan interrupciones en su empleo. Esto es especialmente relevante para garantizar una respuesta adecuada ante fluctuaciones económicas o eventos inesperados.
Perspectivas futuras y recomendaciones
Mirando hacia el futuro, es crucial que tanto la administración como los actores del mercado laboral continúen volcándose hacia la creación de empleos estables y de calidad. La implementación de políticas que fomenten la formación continua, la adaptabilidad y el bienestar de los trabajadores podrá contribuir a consolidar este crecimiento positivo.
Si bien las cifras actuales son alentadoras, los ciudadanos deben mantener un enfoque proactivo en la búsqueda de oportunidades laborales y la mejora de sus habilidades. Considerar la formación en áreas de alta demanda podría ser una estrategia eficaz tanto a nivel personal como profesional, aumentando así las posibilidades de empleabilidad en un contexto laboral en constante evolución.