El mercado de energéticos sigue mostrando variaciones significativas, y recientemente, las cifras han revelado movimientos interesantes en el consumo de combustibles. Durante el acumulado de este año, los combustibles de automoción han presentado un incremento en su uso del 2,2% en comparación con el año anterior. Aunque noviembre mostró una tendencia a la baja, esta cifra anual se sostiene gracias al aumento en las gasolinas, que han subido un 7,4%, así como un ligero aumento del 0,7% en los gasóleos.
Consumo de combustibles de automoción en noviembre
El consumo de combustibles de automoción durante noviembre alcanzó una cifra total de 2,289 millones de toneladas, lo que implica una caída del 1,3% en comparación con el mismo mes del año anterior, y un descenso más pronunciado del 5% frente al mes de octubre. Esta disminución es un dato interesante, especialmente si se considera que durante ese mismo mes, el consumo de gasolinas experimentó un notable aumento del 5,3%. Sin embargo, este incremento no fue suficiente para contrarrestar la disminución del 3% en el uso de gasóleos.
El incremento en el uso de otros combustibles
A pesar de la caída en los combustibles de automoción, noviembre también mostró un comportamiento interesante en otros tipos de combustibles. El consumo de gasolinas, querosenos y fuelóleos vio un crecimiento del 5,3%, 9,6% y 0,7% respectivamente. En cambio, los combustibles como el GLP y los gasóleos registraron una caída significativa, con descensos del 8,9% y 4,8% respectivamente.
Al observar el acumulado anual, los datos mantienen una tendencia positiva en algunos segmentos. Las gasolinas y los querosenos han demostrado ser más resilientes, con incrementos anuales del 7,4% y 11,7%, respectivamente. Por otro lado, los gasóleos auto tienen un leve aumento del 1,0%, mientras que el consumo de GLP permanece estable, es decir, sin fluctuaciones significativas.
Consumo de gas natural en noviembre
Pasando al sector del gas natural, también se han registrado cambios dignos de mención. En noviembre de este año, el consumo de gas natural se situó en 29.461 gigavatios hora (GWh), lo que representa una caída del 14,8% en comparación con el mismo mes de 2023. Sin embargo, cuando se observa más de cerca, se puede notar que todos los tipos de consumo experimentaron incrementos. Por ejemplo, el consumo convencional creció un 7,5%, mientras que el destinado a generación eléctrica tuvo un aumento aún más notable del 36,8%.
Este comportamiento es especialmente interesante si lo contrastamos con el mes anterior, octubre, donde el consumo total de gas natural creció un 24,5%. Una vez más, se produjo un aumento en todas las categorías, incluyendo el uso convencional y el destinado a la generación eléctrica.
El panorama del gas natural en el acumulado anual
A pesar de estos incrementos mensuales, cuando se considera el consumo de gas natural en su conjunto para el acumulado anual, se observa una disminución del 6,2% frente al año anterior. Este descenso presenta un claro contraste con los aumentos del consumo convencional, que subió un 2,5%, y el GNL de consumo directo, que se incrementó en un 11,6%. No obstante, la parte destinada a la generación eléctrica ha mostrado un decremento notable, con una caída del 26,9%.
Esto nos lleva a preguntarnos sobre el futuro de estos sectores en un contexto de transición energética y cambios en el consumo. ¿Estamos viendo el principio de una transformación significativa en el uso de combustibles?
Lo que está claro es que las cifras reflejan un recorrido complejo y diverso en el consumo energético. En un entorno donde se busca cada vez más la sostenibilidad, estos cambios presentan tanto desafíos como oportunidades. Está en manos de los mercados, los consumidores y los reguladores adaptarse a esta nueva realidad, y sobre todo, hacer un uso eficiente de los recursos. Seguir analizando estos datos es clave para entender las tendencias a futuro y cómo afectarán las decisiones económicas y ambientales de todos.