El empresario José Elías, reconocido por ser el dueño de la cadena de alimentos congelados La Sirena, ha tomado una iniciativa sorprendente en el ámbito empresarial. Ha lanzado una página web llamada ‘Make OHL Great Again’, que tiene como objetivo que los accionistas de OHLA deleguen su voto en él. El propósito es claro: lograr una mayoría que le permita oponerse a la renovación de los principales accionistas de la empresa, los hermanos mexicanos Amodio.
Este movimiento surge tras su fracaso en el intento de aumentar su participación accionarial en OHLA. Actualmente, los Amodio controlan el 21.6% de la compañía, mientras que Elías dispone de un 8.7%. Para superarlos, necesitaría desembolsar aproximadamente 60 millones de euros. A través de esta plataforma, Elías busca convencer a los otros accionistas para que le deleguen su voto, lo que podría permitirle truncar la continuidad de los Amodio en el consejo de administración sin tener que hacer un gasto adicional.
Un giro nostálgico en la estrategia
Lo interesante de esta propuesta es la manera en que Elías apela al pasado y la nostalgia. En la página web, utiliza el antiguo logo de OHLA y la anterior denominación, OHL, en un intento de conectar emocionalmente con los accionistas. Esta estrategia hace eco de lo que los Amodio intentaron simbolizar al añadir esa ‘A’ de «Avanzar». Sin duda, esta movida puede resonar entre aquellos que añoran lo que alguna vez fue la marca.
El impacto de los Amodio en la empresa
Desde que los hermanos Amodio asumieron el control de OHLA en 2019, tras la venta realizada por el grupo Villar Mir, la compañía ha dado un notable giro. Su llegada se produjo en un contexto complicado, como lo fue la crisis financiera de 2008, que afectó significativamente al sector inmobiliario. Durante su gestión, se han duplicado los resultados brutos de explotación (Ebitda) de la empresa, y la deuda se ha reducido en más del 50%. Además, la cartera de proyectos ha alcanzado un récord de 9.200 millones de euros.
Esto plantea un interrogante: ¿Puede Elías, con su propuesta, ofrecer algo que realmente mejore esta trayectoria? Aunque la valoración de los Amodio es favorable, Elías argumenta que él puede transformar OHLA en una empresa «más innovadora, más fuerte y más global». Resalta que la compañía necesita «una nueva visión, una nueva energía, un nuevo rumbo».
Un plan audaz que enfrenta desafíos
A través de la mencionada web, Elías ha habilitado un formulario para que los accionistas puedan registrar sus datos y delegar su voto en él. Este esfuerzo busca construir una base sólida de apoyo entre los inversores. Sin embargo, hay una complejidad en su plan. A finales del año pasado, Elías había pactado con los Amodio su entrada en el capital de OHLA, lo que resultó en una inyección de fondos a través de una ampliación de capital. Juntos, lograron hacerse con un 21.7% de la empresa y se integraron en el consejo de administración.
Sin embargo, la situación cambió cuando otros inversores aprovecharon el aumento temporal de las acciones para deshacerse de parte o la totalidad de sus participaciones, y así salir del consejo. Esto dejó a Elías en una posición débil, con su participación reducida a un 8.7% tras no acudir a nuevas ampliaciones de capital.
El futuro de OHLA en juego
El próximo 27 de junio, OHLA celebrará una junta en la que se votará la reelección de los Amodio y de los otros miembros del consejo. Este será un momento crucial. Elías, con su web y su estrategia, espera conseguir la mayoría necesaria para vencer en esta votación y frenar las reelecciones y nombramientos. ¿Logrará su objetivo? ¿Podrá atraer a suficientes accionistas a su causa y revertir la tendencia actual?
A medida que se acerca la fecha de la junta, el interés en el futuro de OHLA crece. Con una empresa que ha demostrado mejorías significativas bajo la gestión de los Amodio, se presenta un verdadero dilema. Por un lado, la continuidad y la estabilidad que ofrecen los hermanos, y por otro, la promesa de innovación y cambio que trae consigo Elías.
Es un momento decisivo, no solo para los accionistas, sino para el futuro de la propia empresa en un entorno cada vez más competitivo. ¿Acabará esta controversia marcando un antes y un después en la historia de OHLA? Será fascinante ver cómo se desenvuelven los acontecimientos y qué camino eligen finalmente los accionistas. Sin duda, el futuro de esta empresa sigue siendo un tema candente que merece nuestra atención.