La Campaña de la Renta y Patrimonio de 2024 comenzará el 2 de abril, permitiendo a los contribuyentes presentar sus declaraciones a través de internet. Este adelanto en comparación con el año anterior, que arrancó el 3 de abril, marca una tendencia a iniciar el proceso antes de la Semana Santa. Así, los plazos establecidos facilitarán la planificación fiscal anticipada para una amplia base de contribuyentes.
Novedades para los parados y criterios de presentación
Uno de los cambios más significativos para este año es que los parados que reciben prestación por desempleo deberán presentar la declaración de la renta a partir de 2025, independientemente de que alcancen o no el importe mínimo requerido anteriormente. Hasta el momento, estos contribuyentes solo estaban obligados a declarar si sus ingresos anuales superaban los 22.000 euros, o los 15.000 si tenían dos o más pagadores y uno de ellos había abonado más de 1.500 euros anuales.
Adicionalmente, se elevará el umbral de los segundos o más pagadores a partir del cual es necesario presentar la declaración, fijándose ahora en 2.500 euros, frente a los 1.500 euros anteriores. Este cambio busca incluir a un mayor número de contribuyentes en el proceso de declaración, lo que podría influir en la recaudación fiscal del año próximo.
Por otro lado, los autónomos continuarán estando obligados a presentar la declaración, sin importar el nivel de sus ingresos, así como los beneficiarios del Ingreso Mínimo Vital (IMV). Esta medida puede impactar significativamente en la manera en que estos grupos gestionan sus cuentas y planifican sus finanzas, dado el aumento de obligaciones administrativas.
Fechas clave para la campaña de la renta
Conforme al calendario establecido, el plazo para la presentación de declaraciones comenzará el 3 de abril y se extenderá hasta el 30 de junio de 2025. Durante este periodo, la Agencia Tributaria ofrecerá asistencia a los contribuyentes. Entre el 6 de mayo y el 30 de junio de 2025, se habilitará la opción de confeccionar la declaración por teléfono, facilitando el acceso a quienes requieran asistencia. Para ello, los contribuyentes podrán solicitar cita telefónica desde el 29 de abril hasta el 27 de junio.
Además, la presentación presencial en las oficinas tributarias se llevará a cabo entre el 2 y el 30 de junio de 2025, donde también será necesario solicitar cita previa. Es importante que todos los contribuyentes estén al tanto de que, si tienen un resultado a ingresar y desean domiciliar el pago, el plazo finalizará el 25 de junio.
Impacto de las devoluciones fiscales
Mirando hacia los números, los últimos datos disponibles sobre el Impuesto sobre la Renta de las Personas Físicas de 2023 (IRPF 2023) revelan que la Agencia Tributaria ha devuelto 12.907 millones de euros a más de 15,8 millones de contribuyentes. Este significativo flujo de devoluciones refleja el compromiso del organismo con la gestión eficiente de las solicitudes de los ciudadanos.
A fecha de 30 de diciembre, se habían procesado el 97,4% de las devoluciones solicitadas, en volumen, y el 94,9% de los importes correspondientes. Estos porcentajes son una señal de que el sistema funciona con eficacia, permitiendo a los ciudadanos recuperar sus excedentes fiscales en un tiempo razonable. Además, observamos un incremento interanual en el número de devoluciones pagadas, con un 7,9% más en número y un 14,5% más en importe. Esto, indudablemente, genera expectativas de estabilidad en el sector fiscal.
En total, se presentaron alrededor de 24.131.000 declaraciones, lo que significa un 4,9% más que el año anterior. De ellas, un 67,5% resultó en devoluciones, y 6.239.000 correspondieron a pagos a ingresar. Estos datos no solo reflejan la situación fiscal de los contribuyentes, sino que también aportan una visión del comportamiento económico en el contexto actual.
Futuro de la campaña de la renta
La anticipación por el inicio de la Campaña de la Renta y los cambios normativos en la presentación son aspectos que sin duda marcarán el día a día de muchos contribuyentes española. Por un lado, el avance hacia una mayor obligación de declarar puede proyectar un cambio en la cultura fiscal del país, fomentando una presentación más voluntaria y acorde con las realidades económicas de los ciudadanos.
A medida que se aproxima el inicio de esta campaña, es vital que todos los contribuyentes se informen adecuadamente sobre los nuevos plazos y obligaciones. Mantenerse al día sobre estas novedades no solo evitará sorpresas desagradables, sino que también permitirá planificar mejor el año fiscal. Las implicaciones de estos cambios son vastas y, sin lugar a duda, el panorama fiscal se va ajustando a las necesidades de una población en constante evolución. Esto invita a la reflexión sobre cómo la fiscalidad puede adaptarse a la realidad económica de cada individuo y cómo cada uno de nosotros puede ejercer un papel activo en la construcción de una economía más equitativa.