Greening ha registrado un nuevo hito en su trayectoria empresarial al anunciar su primer programa de emisión de bonos verdes. Este innovador movimiento se llevará a cabo en el MARF, el Mercado Alternativo de Renta Fija de BME, y tiene un límite de hasta 30 millones de euros a un período de cinco años. La firma ha señalado que esta decisión no solo la posiciona favorablemente en el ámbito financiero, sino que también contribuirá a su compromiso con la sostenibilidad.
Detalles de la emisión y su impacto financiero
La emisión de bonos verdes ofrece a Greening la oportunidad de acceder a financiación a plazos, lo que representa una ventaja estratégica en la gestión de capital. Al contar con estos recursos, la compañía está en una posición óptima para minimizar y optimizar los costes de sus fuentes de financiación, un aspecto crucial en un escenario económico donde la eficiencia es clave.
Además, este programa es un catalizador para apoyar su plan de negocio 2024-2026. Greening se ha propuesto alcanzar una capacidad de operación de 800 megavatios (MW) para finales de 2026, un objetivo ambicioso que refleja su determinación por crecer y diversificarse en un mercado en constante evolución.
Calificación y respaldo de los bonos
La emisión de bonos ha recibido una calificación de ‘BBB-’ con la etiqueta de ‘investment grade’ por parte de Ethifinance. Esto es un claro indicador de la solidez financiera de la empresa. Ek sistema de rating también ha actualizado la calificación corporativa de Greening, manteniendo un notable ‘BB’ con perspectiva «estable».
Este respaldo financiero es significativo, especialmente porque el rating de la emisión está dos niveles por encima del rating corporativo. Esta distancia se debe a las robustas garantías proporcionadas por una cartera de proyectos de energía renovable, así como a una estructura de compromisos financieros adecuada en múltiples niveles. Así, la empresa no solo asegura su financiación, sino que también resalta su enfoque en la sostenibilidad y la innovación.
Compromiso estratégico y futuro sostenible
El plan de negocio presentado por Greening el pasado mes de mayo está diseñado para fomentar la diversificación geográfica, tecnológica y por líneas de actividad. Este enfoque integral no solo refuerza su resiliencia, sino que también la prepara para cualquier posible pérdida de dinamismo que pueda surgir en los mercados. En un mundo donde las industrias deben adaptarse rápidamente a los cambios, esta estrategia se torna vital.
Además, se vislumbra una tendencia creciente hacia inversiones sostenibles, lo que coloca a Greening en una posición favorable en un mercado donde cada vez más inversores buscan alinear sus carteras con principios de sostenibilidad.
Colaboraciones clave en el proceso de emisión
Para llevar a cabo esta emisión, Greening ha establecido una colaboración efectiva con Renta 4 Banco. Esta entidad ha actuado como asesor registrado del programa, además de ser la entidad colocadora y el agente de pagos. Este tipo de asociaciones son esenciales, ya que facilitan el acceso a los mercados y aportan una valiosa experiencia en la gestión de emisiones de bonos.
Con esta alianza, Greening fortalece su posición en el ecosistema financiero, y al mismo tiempo, asegura que su innovación y proyectos de energías renovables tengan la financiación necesaria para avanzar. La sinergia entre empresas en la esfera financiera y medioambiental puede servir de modelo para otras compañías en el camino hacia un futuro más sostenible.
Reflexión sobre el futuro de las energías renovables
En conclusión, el primer programa de emisión de bonos verdes de Greening abre un abanico de oportunidades no solo para la empresa, sino también para el mundo de las inversiones en sostenibilidad. A medida que el interés por las energías renovables se intensifica, es relevante observar cómo compañías como Greening lideran el camino hacia un desarrollo más responsable y acorde con las necesidades sociales y ambientales actuales.
Así, el diálogo sobre el futuro de las energías renovables y la economía sostenible sigue en curso, y cada paso que se da hacia adelante puede marcar la diferencia en la transición energética que tanto anhelamos. ¿No es hora de pensar en cómo nuestras elecciones hoy pueden definir el legado que dejamos para las próximas generaciones?