Fátima Báñez, exministra de Empleo y Seguridad Social en el Gobierno de Mariano Rajoy y actual presidenta de la fundación de la patronal CEOE, ha hecho un llamado a reforzar el diálogo social en lugar de aceptar la «imposición normativa del Gobierno» respecto a la reducción de la jornada laboral. En este contexto, enfatizó la importancia de crear empleo de calidad mediante la negociación colectiva.
Desafíos del absentismo laboral
Durante su intervención, Báñez apuntó que el absentismo laboral es uno de los factores más impactantes en el desempeño de las empresas. Hizo un llamado a perseguir el fraude relacionado con el absentismo, mientras se presta atención a la salud de los trabajadores, tanto física como mental. En este sentido, Rocío Blanco, consejera de Empleo de Andalucía, destacó que su comunidad es la que «menos absentismo laboral tiene en España», alcanzando un 4,9%, comparado con una media nacional del 7,5%.
El absentismo no solo afecta a la salud de los trabajadores, sino que también impacta la productividad y la competitividad de las empresas. Por lo tanto, se necesita una estrategia efectiva que contemple tanto el bienestar de los empleados como la necesidad de las empresas de contar con un personal disponible y en condiciones óptimas.
Para Báñez, la situación actual en el mercado laboral muestra una creciente aportación de vacantes por cubrir en España, aunque persiste un desajuste entre la oferta y la demanda de empleo. Es aquí donde la Formación Profesional (FP) juega un papel crucial, ya que Andalucía se está posicionando como un modelo a seguir en este ámbito.
La importancia del diálogo social
Durante un evento informativo en la Universidad CEU San Pablo, titulado ‘Mercado de trabajo: España, Europa y el capital humano’, la exministra de Trabajo reiteró que «la prioridad del país es seguir creando empleo de calidad». Esta afirmación subraya que es un momento propicio para tener más negociación colectiva y menos imposición normativa. Según Báñez, defender estos valores también implica fomentar la creación de riqueza y cohesión social en España.
Rocío Blanco, quien también participó en el encuentro, compartió la inquietud de Báñez, lamentando que «toda la estrategia para reformar el mercado laboral» se enfoque principalmente en la reducción de la jornada. A su juicio, esto se traduce en un «brindis al sol» que no considera las realidades de los empresarios. En lugar de soluciones basadas en la regulación del tiempo laboral, insistió en que la negociación colectiva debe ser el marco para establecer acuerdos que beneficien a todas las partes involucradas.
Un progreso en materia de empleo en Andalucía
En otro segmento del evento, Báñez aprovechó la ocasión para destacar el avance que Andalucía ha mostrado en el ámbito de empleo en los últimos años. A su juicio, esta mejora se debe en parte a la «estabilidad del gobierno de Juanma Moreno», quien presenta presupuestos año a año. En un panorama que anteriormente era complejo en torno al empleo, Báñez cree que Andalucía se ha convertido en un protagonista de su propio futuro económico.
La exministra abogó también por un mayor respeto hacia las empresas, que son las responsables de la generación de riqueza y oportunidades. Es fundamental que se les brinde seguridad jurídica y confianza, especialmente en un clima en el que las burocracias pueden ser un freno para el crecimiento. Además, subrayó la necesidad de simplificar los procesos administrativos para fomentar el emprendimiento.
Fiscalidad competitiva y retos actuales
Báñez también subrayó la relevancia de contar con una fiscalidad competitiva para que las empresas puedan enfrentar retos como la digitalización y la aplicación de la Inteligencia Artificial. La necesidad de atraer y fidelizar talento es cada vez más marcada y es crucial que las empresas tengan un entorno favorable para poder lograrlo.
En este sentido, Blanco añadió que uno de los motores del crecimiento de Andalucía radica en la atracción de inversiones de gran valor añadido en sectores como la defensa, las energías renovables y el hidrógeno verde. «Nos estamos quitando todos los complejos y estereotipos que tenía Andalucía», afirmó, conectando este progreso con la mejora en las cifras de empleo, a pesar del alto nivel de paro que aún persiste.
Se necesita, por lo tanto, un esfuerzo conjunto entre administraciones y empresas para crear un ecosistema que no solo fije metas a corto plazo, sino que fomente un desarrollo sostenido y de calidad a largo plazo. Esto requiere reflexión y una evaluación continua de qué políticas son realmente efectivas en el camino hacia un mercado laboral competitivo y dinámico.
Este contexto revela que muchas de las decisiones que se tomen hoy pueden tener repercusiones significativas en el futuro laboral de España. Así, es crucial que tanto las administraciones como el sector empresarial sigan trabajando en conjunto para fomentar un entorno donde la negociación y la colaboración sean los pilares del desarrollo económico.