Adif, Renfe e Ineco están dando un paso importante en la mejora de la accesibilidad en el transporte ferroviario. En la estación de Málaga María Zambrano, han instalado un punto físico de ayuda, un tótem accesible que tiene como objetivo facilitar la movilidad de las personas con discapacidad. Este prototipo es parte de un proyecto piloto que busca implementar soluciones tecnológicas innovadoras para transformar la experiencia de viaje.
Innovación en la aceleración de la accesibilidad
Este punto de información está diseñado con una forma ergonómica y visible a distancia, lo que permite que los usuarios lo localicen fácilmente en entornos que suelen ser complejos, como una estación ferroviaria. Además, el tótem cuenta con capacidades táctiles que ofrecen información personalizada sobre horarios, andenes y rutas interiores. Desde allí, los usuarios también pueden solicitar la asistencia de un robot diseñado para ayudar en diversas tareas.
Otro aspecto atractivo del tótem es su conexión con una aplicación de guiado móvil. Esta herramienta complementa la experiencia del usuario permitiendo, por ejemplo, la visualización de rutas accesibles en mapa y el escaneo de billetes. Este enfoque multidimensional no solo mejora la interacción, sino que también amplía las opciones de acceso a la información.
Pruebas de funcionalidades del tótem
Del 15 al 17 de julio, se llevarán a cabo pruebas reales en las que participarán personas con varios tipos de discapacidad —desde visual a motora— para validar no solo el funcionamiento del tótem, sino también el de las herramientas complementarias que lo acompañan. Entre las funcionalidades que se van a evaluar está el acceso a información en tiempo real sobre horarios de tren, cancelaciones y frecuencias del metro, lo cual es crucial para la planificación del viaje.
Por otra parte, la posibilidad de escanear billetes para identificar en qué vía se encuentra el tren podría marcar una diferencia significativa en la experiencia del usuario. La visualización y el guiado hacia rutas accesibles será probado a través de aplicaciones móviles, robots y códigos de acceso como NaviLens, un tipo de código QR diseñado específicamente para personas con discapacidad visual.
Implicaciones económicas y sociales
Este nuevo tótem se integra en uno de los seis grandes proyectos emblemáticos del programa europeo ‘European Rail Joint Undertaking’ (ERJU). Este programa cuenta con la participación de Adif, Adif Alta Velocidad, Renfe Operadora, Cedex e Ineco. El foco central de la iniciativa es el proyecto denominado ‘Motional’ (FP1), el cual busca gestionar la red y crear movilidad en un entorno multimodal.
Es notable mencionar que estos seis proyectos tienen una valoración total de 568,4 millones de euros. La implementación de este tipo de soluciones no solo tiene implicaciones en el ámbito de la accesibilidad, sino que también refuerza el compromiso con el desarrollo económico sostenible en el sector del transporte. Al crear un sistema ferroviario europeo que sea interoperable y eficiente, se están sentando las bases para un futuro más integrado y centrado en el usuario.
Más allá de la tecnología: el enfoque humano
Uno de los prototipos complementarios en desarrollo es Gobos, un sistema de proyección luminosa que facilita a las personas con movilidad reducida la anticipación de la ubicación de la puerta accesible del tren. Este tipo de innovaciones no solamente mejora la autonomía, sino que también enriquece la experiencia de viaje, puesto que permite que las personas se sientan más seguras y menos dependientes.
Adif ha indicado que «este piloto ya ha sido validado por personas con discapacidad, personal ferroviario y técnicos especializados». Esto sugiere que la información que se recoja en el proceso de prueba será crucial para evaluar el impacto del sistema y su escalabilidad en el futuro, lo cual es fundamental para cualquier proyecto de esta magnitud.
Mirando al futuro
De manera general, la propuesta que se está llevando a cabo en la estación de Málaga subraya la importancia de la colaboración entre diferentes entidades para transformar no solo un servicio, sino un concepto completo de movilidad. Con un enfoque en un sistema ferroviario que sea accesible y eficiente, la tecnología y las personas pueden converger para ofrecer una mejor calidad de vida a quienes dependen de estos servicios.
Al unir tecnologías innovadoras con un enfoque centrado en el usuario, se están abriendo nuevos caminos en el transporte público que invitan a la reflexión sobre cómo podemos seguir mejorando nuestras infraestructuras y servicios. La intersección entre tecnología y accesibilidad no es solo una cuestión de comodidad, sino de inclusión social. Esto nos lleva a plantear cómo será la movilidad del futuro y qué pasos se deben tomar hoy para garantizar un viaje seguro para todos.