La gestión activa de coberturas se ha convertido en un pilar fundamental para muchas instituciones financieras en la actualidad. Este es el caso de Dunas Capital, una firma independiente que ha estado implementando tácticas de protección de carteras mediante instrumentos derivados como futuros y opciones. Esta estrategia se ha vuelto esencial, especialmente en momentos de repunte de la volatilidad del mercado.
El contexto financiero actual
En el fascinante mundo de la economía, los desafíos son constantes. En este sentido, el entorno actual se caracteriza por una elevada incertidumbre política, el aumento del déficit público en Estados Unidos y Europa, y una desaceleración económica a nivel global. Estos factores plantean riesgos que deben ser considerados para una gestión prudente de activos.
Particularmente en relación al déficit público, Estados Unidos enfrenta un 7%, un indicador problemático a largo plazo, ya que presenta un desequilibrio fiscal notable. Mientras tanto, Europa observa a Francia, considerado el alumno más díscolo de la ortodoxia fiscal. Esta situación invita a la reflexión sobre cómo gestionar los activos en un clima de riesgo creciente.
Estrategia de inversión: prudencia ante la volatilidad
Ante un 2025 marcado por la volatilidad y la incertidumbre económica, el equipo de Dunas Capital ha optado por limitar el riesgo reduciendo posiciones en Bolsa y apostando por la renta fija, concentrándose en activos de alta calidad a corto plazo. Esta filosofía de preservar el capital ha demostrado ser acertada, ya que todos los vehículos de la entidad han cerrado la primera mitad del año con rendimientos positivos, que oscilan entre el 1,7% y el 7%.
El aumento de 645 millones de euros en activos bajo gestión, alcanzando un total de 4.200 millones de euros, puede atribuirse en parte al proceso de integración de Gesnorte, que adquirieron hace un año. Este avance en el patrimonio refleja la capacidad de la firma para adaptarse a un entorno cambiante y maximizar sus oportunidades de inversión.
Inversiones en renta fija y variable
La estrategia en renta fija ha estado marcada por duraciones cortas y una exposición concentrada en activos de alta calidad, evitando de manera sistemática los plazos largos y limitando la exposición a deuda pública ‘high yield’ y activos subordinados. Sin embargo, Dunas ha hecho algunas «breves incursiones» tácticas en estos segmentos en momentos de corrección del mercado.
Por ejemplo, tras el ‘Liberation Day’ del 2 de abril, en el que se desató una guerra comercial por parte de Estados Unidos, observaron oportunidades en bonos subordinados de la banca de primer nivel que ofrecieron rendimientos de hasta el 7%. Esto demuestra que, aunque la estrategia se centra en la prudencia, la firma no descarta actuar cuando el contexto lo permite.
Selección de compañías en renta variable
En la cartera de renta variable, Dunas Capital ha realizado una selección rigurosa de compañías con fuerte generación de caja, enfocándose en sectores estratégicos como electrificación, sanidad y finanzas. A su vez, han mantenido distancia de entidades con valoraciones excesivas o aquellas muy expuestas a crecimiento futuro, como el consumo, lujo y tecnología.
Con una cartera que pivota en torno a 31 valores, han optado por ajustar el peso de sus inversiones en función de las revalorizaciones bursátiles. Además de nombres reconocidos como Santander y BNP Paribas, han reafirmado su apuesta en empresas alineadas con las tendencias europeas de gasto en defensa, infraestructura y digitalización.
Perspectivas a futuro
De cara al futuro, el especialista José María Lecube ha indicado que llegará el momento de apostar por deuda europea con horizontes temporales más largos, a medida que los grandes planes de inversión y rearme en Europa, liderados por Alemania, vayan tomando forma. Además, se ha previsto un aumento en la necesidad de financiación por parte de los gobiernos, lo que también podría alterar el panorama de inversión.
El director de análisis macroeconómico, Borja Gómez, sugiere que «nos van a salir ‘bunds’ por las orejas», aludiendo a las oportunidades que pueden surgir en el mercado de bonos bajo estos escenarios. La clave aquí es la capacidad de adaptarse y reaccionar a las condiciones del mercado.
Finalmente, el director de inversiones, Alfonso Benito, señala que han «apretado el botón de preservación de capital» ante la complejidad de la situación actual. Con el mensaje de que «estamos peor en términos macro que hace seis meses», es evidente que la estrategia de Dunas Capital no solo anticipa cambios, sino que también se anticipa a las necesidades del mercado.
Así que, al reflexionar sobre el enfoque adoptado por Dunas Capital y las condiciones del mercado, la pregunta que queda es: en un mundo financiero lleno de incertidumbres, ¿cómo se preparan las instituciones para lo inesperado? Si algo es seguro, es que el camino por delante estará lleno de decisiones estratégicas que definirán el éxito en mercados volátiles.