La Plataforma Denaria está haciendo un llamado al Banco de España para que declare el dinero en efectivo como un servicio público esencial. En un contexto donde los métodos de pago están en constante evolución, la organización cree que la entidad supervisora es la «institución adecuada» para abordar este tema, especialmente tras una jornada celebrada en Alicante que enfatizó la relevancia del efectivo en la sociedad actual.
La importancia del efectivo en la sociedad
El efectivo sigue siendo una herramienta fundamental en nuestras vidas diarias. A pesar de la creciente digitalización de los pagos, muchos ciudadanos aún dependen del dinero en efectivo para realizar sus transacciones diarias. No solo es un medio de pago, sino que también actúa como un refugio en situaciones críticas donde otras opciones podrían fallar.
La plataforma Denaria resalta que el dinero en efectivo, a diferencia de muchas alternativas modernas, no requiere de una infraestructura tecnológica. Esto permite que siga siendo funcional en escenarios adversos, como apagones, desastres naturales o ciberataques, como el que tuvo lugar el 28 de abril. En estas circunstancias, asegurarse de que todos tengan acceso a efectivo se vuelve imperativo.
Un paso hacia la inclusión del efectivo
Aunque la decisión final sobre qué constituye un servicio esencial recae en el Gobierno, Denaria sostiene que una declaración formal del Banco de España, en coordinación con el Ministerio de Economía, sería un «primer paso» significativo hacia la formalización del efectivo como un servicio esencial bajo la Ley de Protección Civil. Este movimiento no solo beneficiaría a aquellos con acceso limitado a opciones digitales, sino que también podría fortalecer los mecanismos de respuesta a emergencias.
«Esta medida permitiría fortalecer los mecanismos de prevención y respuesta ante situaciones de emergencia, garantizando que los ciudadanos nunca se vean privados de su derecho a pagar en efectivo», afirman desde la plataforma. La inclusión del efectivo como servicio esencial podría ofrecer un respaldo crucial para la seguridad económica y social de la población.
Definición de servicios esenciales
Según la Ley 17/2015, de 9 de julio, del Sistema Nacional de Protección Civil, los «servicios esenciales» son aquellos necesarios para el mantenimiento de funciones sociales básicas. Esto incluye la salud, la seguridad, el bienestar social y económico de los ciudadanos, y el funcionamiento eficaz de las instituciones del Estado y las administraciones públicas.
En este contexto, Denaria argumenta que los sistemas de pago deben ser considerados «infraestructuras críticas», al igual que servicios como el transporte, la electricidad o las telecomunicaciones. ¿Por qué? Porque el efectivo es un único medio de intercambio que sigue funcionando sin necesidad de electricidad o servicios digitales.
Acciones y propuestas concretas del Banco de España
La Plataforma Denaria también ha destacado el papel central del Banco de España en la protección del acceso al efectivo. A través del desarrollo del Índice de Vulnerabilidad en el Acceso al Efectivo (IVAE) y estudios periódicos, se identifican las áreas y grupos en riesgo de exclusión financiera. En este sentido, el Banco de España está trabajando activamente con otras entidades para garantizar que el efectivo siga estando disponible para todos.
Además, se han propuesto soluciones como oficinas móviles y acuerdos con Correos para mejorar la cobertura territorial del efectivo. Estas iniciativas son importantes para garantizar que nadie quede atrás en un mundo donde las opciones de pago digitales son cada vez más predominantes.
Ejemplos internacionales de defensa del efectivo
Es interesante observar que otros países han tomado medidas firmes para proteger el acceso al efectivo. Francia, Suecia y Eslovenia, entre otros, han implementado políticas dirigidas a consolidar el efectivo como un elemento estratégico de resiliencia nacional. Estas acciones podrían servir como modelo para España, y Denaria anima a las autoridades a mirar hacia estas experiencias al formular sus propias políticas.
Este contexto internacional pone de manifiesto la relevancia de considerar el acceso al efectivo no solo como un derecho individual, sino como un pilar fundamental de la estabilidad económica de una nación. La resiliencia ante crisis económicas o desastres es una cuestión que merece atención.
Con todas estas consideraciones, es evidente que la lucha de la Plataforma Denaria por la inclusión del dinero en efectivo como un servicio esencial es parte de un debate más amplio sobre cómo garantizar que todas las personas, independientemente de su situación económica o acceso tecnológico, tengan la seguridad de poder realizar sus transacciones con total libertad y estabilidad. ¿Estamos, como sociedad, preparados para asegurar un futuro donde el acceso al efectivo esté garantizado para todos? Este es un dilema que, sin duda, requerirá nuestra atención continua.