El ministro de Transportes y Movilidad Sostenible, Óscar Puente, ha sostenido una reunión en Londres con su homóloga británica, Heidi Alexander, donde se discutieron los planes de expansión de la alta velocidad en el Reino Unido. Durante este encuentro, Puente subrayó el interés de las empresas españolas por participar en el desarrollo de estas infraestructuras, destacando la experiencia acumulada por España, que se posiciona como el segundo país del mundo después de China en la implementación de trenes de alta velocidad.
La exportación del modelo español de alta velocidad
Puente enfatizó que el modelo ferroviario español se caracteriza por ser «de probada eficacia y competitividad», ya que España es la única nación europea que cuenta con tres operadores compitiendo en la misma línea. Este modelo, tal como se ha demostrado en varias ocasiones, ha permitido mejorar la eficiencia y atraer a un número creciente de usuarios a la red ferroviaria.
La aportación de ingenieros españoles en proyectos de infraestructura clave en el Reino Unido también fue un punto destacado en la conversación. Alexander mencionó la importancia de estos profesionales en el desarrollo de la línea de alta velocidad HS2, que conectará Londres con Birmingham, así como en otras iniciativas que buscan adaptar la red ferroviaria a los retos del cambio climático. Entre las empresas involucradas se encuentran Renfe, Adif y actores privados como ACS y CAF, lo que pone de manifiesto el alcance y compromiso del sector ferroviario español.
Renacionalización de los ferrocarriles en el Reino Unido
Durante la reunión, Puente expresó su apoyo a la reciente decisión del nuevo gobierno laborista del Reino Unido de renacionalizar los ferrocarriles, particularmente las compañías que operan los trenes. Recordó que la privatización de estos servicios en la década de 1990 ha llevado a una falta de uniformidad en tarifas y modelos de billetes, impactando negativamente en la experiencia del usuario. «Celebro la decisión del gobierno británico de renacionalizar el ferrocarril a través de Great British Railways. El tren es la columna vertebral de un sistema de transporte sostenible, accesible, seguro y eficiente, y es crucial que cuente con toda la fuerza e implicación del Estado», afirmó Puente.
La renacionalización busca revitalizar un sistema que ha venido siendo objeto de críticas por su fragmentación en la gestión de tarifas y servicios, algo que muchos expertos consideran esencial para mejorar la calidad del servicio y la confianza de los usuarios en el transporte ferroviario.
Interés en el desarrollo del transporte aéreo sostenible
Además de las cuestiones ferroviarias, el ministro Puente manifestó su interés en el sector aeroportuario británico, considerado un mercado dinámico y atractivo para las empresas españolas. Espacios como el aeropuerto de Londres-Luton, donde Aena ha desarrollado un plan de ampliación, ilustran la capacidad de las compañías españolas para participar en el desarrollo de infraestructuras críticas del Reino Unido.
En este contexto, Puente puso de relieve la necesidad de garantizar una conectividad aérea sostenible. Destacó que España posee un enorme potencial para producir aproximadamente 73,8 millones de toneladas de combustibles alternativos sostenibles para la aviación (SAF), lo que podría convertir al país en un centro de producción clave en este ámbito, siempre que se lleven a cabo las políticas y medidas adecuadas.
Colaboración en descarbonización y sostenibilidad
Tanto España como el Reino Unido se han posicionado como líderes en el uso de SAF, una estrategia considerada la vía más directa y efectiva para la descarbonización del transporte aéreo. Puente se interesó por conocer los planes británicos para desarrollar el SAF, así como los programas de incentivos destinados a promover inversiones en este sector emergente.
Asimismo, el ministro español expuso su intención de establecer corredores marítimos verdes entre ambos países, lo que contribuiría a acelerar la descarbonización del transporte marítimo, que se considera una de las áreas más complejas en la transición hacia una economía sostenible.
De esta manera, las conversaciones entre los ministros no solo abordan el presente del sector del transporte, sino que también sientan las bases para una colaboración futura que podría transformarse en un modelo de referencia para otras naciones. La interconexión de esfuerzos en materia de sostenibilidad, tanto en el transporte ferroviario como en el aéreo, resaltan la voluntad de ambas naciones de trabajar en conjunto en asuntos de importancia global, alineándose con las metas de reducción de emisiones y adaptación al cambio climático.
Las iniciativas discutidas tienen repercusiones significativas no solo para la relación bilateral entre España y Reino Unido, sino también respecto a los objetivos más amplios de sostenibilidad establecidos a nivel global. el futuro del transporte depende en gran medida de la capacidad de países como estos para innovar, cooperar y cambiar el marco normativo que guía la movilidad en el siglo XXI.