Los españoles gastaron de media casi 2.100 euros al año en productos frescos, de los cuales más de la mitad, alrededor de 1.200 euros, se destina a compras en el supermercado. Este último se ha convertido en la opción más elegida por los consumidores debido a su relación calidad-precio. Así se desprende de la séptima edición del Observatorio de Productos Frescos, un informe realizado por Aldi en España.
Un cambio en los hábitos de consumo
Las cifras reflejan un cambio notable en los hábitos de compra. Más del 50% de los consumidores han modificado su forma de adquirir frescos en los últimos tres años; de estos, tres de cada cuatro lo han hecho por razones económicas. A pesar de que la inflación se ha moderado, un sorprendente 55,1% de los encuestados adelanta que seguirá ajustando su presupuesto este año.
Pero, ¿qué está detrás de este cambio? El informe confirma que el precio sigue siendo un factor crucial. Según los datos, nueve de cada diez consumidores consideran el precio un elemento importante, mientras que un 72% toma en cuenta la relación calidad-precio, que se ha convertido en el principal motivo de compra en el sector de los productos frescos.
La Cesta de la Compra y el Gasto en Productos Frescos
A pesar de estos cambios en los hábitos de consumo, los frescos siguen siendo protagonistas en la cesta de la compra. De hecho, se destinan cuatro de cada diez euros de la alimentación a esta categoría. Sin embargo, el informe revela que en el último año los españoles compraron 3 kilos menos por acto de compra, lo que supone una disminución del 9% en comparación con los últimos tres años. Esto sugiere que, aunque las familias continúan comprando frescos con regularidad, lo hacen en cantidades menores.
En términos de gasto, la carne fresca se lleva la mayor parte del presupuesto familiar en productos frescos, con un total de 569,86 euros. Le siguen las frutas, con 413,47 euros, y las verduras, que suponen 339,21 euros. Productos como los huevos y el pan fresco reciben asignaciones menores, con 73,93 euros y 126,27 euros respectivamente.
Preferencias por Comunidad Autónoma
Analizando más a fondo, el informe destaca diferencias significativas en el gasto por comunidades autónomas. El País Vasco lidera la tabla, invirtiendo hasta 2.608 euros en frescos al año, seguido por Cataluña y Castilla y León. Por otro lado, Canarias se encuentra en el extremo inferior del gasto, destinando solo 1.689 euros.
Sin duda, estas diferencias son notables y ponen de manifiesto cómo varían los hábitos de consumo en función del lugar de residencia.
El impacto de los precios en la compra de frescos
La relación entre calidad y precio ha cobrado una importancia sin precedentes. El estudio revela que las frutas y verduras que más han crecido en ventas son precisamente aquellas cuyos precios han bajado en el último año, como las cerezas, tomates, mandarinas, pimientos y melones. En el caso de la carne y el pescado, los consumidores también prefieren aquellos productos que ofrecen un mejor precio por kilo, como son el boquerón, sardina, salmón, pollo y cerdo.
Estas tendencias reflejan una clara preferencia por adquirir productos en función de su coste-beneficio, lo que está ajustando aún más el comportamiento de compra de los hogares españoles.
Aldi, un jugador clave en el mercado español
Con el 85% de sus compras de productos en frescos procedentes de proveedores nacionales, Aldi se posiciona como un actor crucial en el sector. La cadena ha reportado un incremento en la venta de frescos del 23% en 2024 y, además, sus precios fueron alrededor de un 13% más bajos que el promedio del sector, según datos de Kantar WorldPanel.
En un contexto donde Aldi planea abrir 40 nuevos supermercados en España este año, la firma se esfuerza por estar más cercana a sus clientes y adaptarse a sus necesidades. Silvia Segarra, directora de Comunicación y Relaciones Institucionales de Aldi España, ha resaltado que hay un claro potencial para seguir creciendo. Su propuesta está centrada en ofrecer un descuento real y una compra fácil, lo que aparentemente resuena positivamente en el mercado español.
El futuro del consumo de frescos
Así, el panorama que se dibuja para el consumo de frescos en España parece estar en constante evolución. Las familias siguen priorizando la compra de productos frescos, pero lo hacen cuidando más que nunca de su presupuesto, en un entorno donde el precio juega un papel central.
Las decisiones de compra no solo están siendo guiadas por la búsqueda de calidad y conveniencia, sino que también están influenciadas por una creciente conciencia del presupuesto. Este enfoque podría muy bien continuar definiendo el comportamiento de los consumidores en el futuro, lo que nos invita a reflexionar sobre cómo las dinámicas del mercado y la economía seguirán moldeando nuestras decisiones diarias en la compra de frescos.