El magistrado José Luis Calama lidera actualmente la investigación en torno a la firma de análisis Gotham City, la cual enfrenta acusaciones por presuntamente haber difundido información engañosa sobre la empresa Grifols. Esta situación ha ocasionado que el mercado se mueva drásticamente, afectando significativamente la cotización de las acciones de Grifols.
La denuncia de Anticorrupción
Una denuncia de la Fiscalía Anticorrupción fue admitida por el juez Calama en noviembre del año pasado. Esta denuncia solicitaba la investigación de Gotham City, General Industrial Partners LLP y varios de sus directivos. El argumento principal de la denuncia es que estos actores supuestamente lanzaron información sesgada, destinada a desvirtuar la credibilidad de Grifols. El objetivo era, según se alega, inducir a los inversores a desprenderse de sus acciones, lo que desembocaría en una caída del precio y permitiría a los denunciantes obtener un beneficio considerable.
El magistrado apuntó que este comportamiento podría ser considerado un delito, según lo estipulado en el artículo 284.1.2 del Código Penal. Este artículo penaliza a quienes, a través de diversos medios, difunden noticias o rumores falsos sobre personas o empresas, con el fin de alterar el precio de cotización de un instrumento financiero. En el caso en cuestión, se resalta la publicación de Gotham entre el 8 y 9 de enero del presente año en lo que anteriormente era Twitter, en la que se afirmaba que las acciones de Grifols valían 0 euros.
Las repercusiones financieras
El informe de Gotham tuvo consecuencias palpables: el 9 de enero, las acciones de Grifols mostraron pérdidas que alcanzaron los 3.814 millones de euros antes de que finalizara la sesión de negociación. Pero, ¿qué implicaciones tiene esto? Para el inversor promedio, estas cifras son alarmantes; para la empresa, representan un golpe significativo a su capitalización y reputación. Gotham, en su análisis, reveló también que era una filial de General Industrial Partners LP, que mantenía una posición corta en Grifols, superior al 0,5% del capital social.
La posición corta es una estrategia de inversión que implica vender acciones que no se poseen, esperando que su precio baje para luego comprarlas de nuevo a un costo menor. Este tipo de operaciones no solo plantea preguntas éticas, sino también legales, dado el contexto de engaños y reportes falsos. Tras el informe de Gotham, dicha posición se vio reducida drásticamente al 0,06%, lo que plantea dudas sobre la transparencia y las intenciones detrás de la publicación.
Interrogatorios en marcha
El director general de Mercados de la CNMV, Ángel Benito, será testificado por el juez el próximo viernes. Esta declaración es particularmente relevante ya que Benito ha expresado desacuerdo con diversos aspectos del reporte de Gotham sobre Grifols. Durante una audiencia reciente, Eduardo Manso, director del departamento de Información Financiera y Corporativa de la CNMV, también fue interrogado acerca de este tema. Manso ha defendido la labor de la CNMV, resaltando que sus informes tienen un propósito distinto: validar que los resultados económicos de una empresa cumplan con la normativa contable.
Esta conversación es clave para entender la diferencia entre las misiones de la CNMV y las de firmas como Gotham, cuya finalidad parece ser más detractora al sugerir que el valor de Grifols estaba en cero. En su explicación, Benito se desmarcó de las afirmaciones de Gotham, sugiriendo que son infundadas y no reflejan la realidad del mercado. La CNMV se centra en la protección del inversor, mientras que Gotham parece buscar una agenda diferente.
El futuro del caso
La ronda de declaraciones continuará el próximo 9 de mayo, cuando el expresidente de la CNMV, Rodrigo Buenaventura, sea interrogado. La importancia de su testimonio radica en su experiencia y en su rol en la regulación del mercado español, ya que su perspectiva a nivel de dirección podría ofrecer información valiosa sobre las prácticas que rigen la actividad de las firmas de análisis y su responsabilidad en la divulgación de información.
Mientras la investigación avanza, muchos se preguntan cuáles serán las consecuencias finales para Gotham City y los ejecutivos implicados. Las preguntas sobre la ética de las prácticas de análisis y sus repercusiones en la confianza de los inversores son más pertinentes que nunca. La situación actual nos brinda la oportunidad de reflexionar sobre la importancia de la transparencia y la responsabilidad en el ámbito de los mercados financieros.
A medida que surgen nuevas informaciones, la comunidad inversora observa atentamente los giros de este caso, que puede sentar un precedente en la regulación de firmantes de análisis en el futuro. ¿Estamos presenciando un turning point en cómo se manejan las malas prácticas en el análisis financiero? Es un tema que seguramente merecerá un análisis profundo en el futuro.